martes, octubre 23, 2018

Máster en vaqueros: slim, skinny, straight, cropped...

   
Perdida entre vaqueros

 ─Hola, ¿te puedo ayudar en algo? ─me pregunta una chica pizpireta al ver mi cara de estupor en la sección de ropa masculina.
     ─Estoy buscando unos vaqueros para mis hijos.
     ─¿Qué tipo de denim prefieres?
     ─¿Perdón?
     ─El denim es el tejido con el que se elaboran los pantalones.
     ─Te refieres a lo que en los noventa llamábamos tela vaquera.
     ─Eso, eso. Bueno en estos estantes tenemos distintos modelos de denim. ¿Qué estilo se ajusta más a sus gustos: slim, skinny, loose, straight, cropped o carrot fit?
     ¡Dios mío me acaban de teletransportar a EE.UU. y no me he enterado! ¿Pero por qué me habla esta chica en inglés?
    ─Pues me has dejado helada... No sé ni qué contestarte.
    ─Ay, no estás a la última.
    ─Pues va a ser que no... ─le contesto con unas ganas imperiosas de darle un puñetazo en la nariz, aunque no sea políticamente correcto.
    ─Pobre, te lo voy a explicar ─otra frasecita así y la estampo─. Los skinny son pantalones estrechos.
    ─Los pitillos de toda la vida, ¿no?
    ─Exacto, lo has pillado. Los slim fit son estrechos pero solo en la parte de las caderas y los muslos. Es decir, dejan un poco de libertad y soltura en las rodillas y gemelos. Los straight son rectos. Los cropped son ideales para el verano porque son sueltos  y están cortados a la altura del tobillo y los carrot fit son anchos por arriba y estrechos por debajo, la pasión de los surfistas. ¿Lo has entendido?
    ─Claro, bonita, me ha quedado superclaro, sobre todo lo de los vaqueros zanahoria. Decidido, ahora mismo hago una transferencia a mis hijos y que se compren ellos lo que les dé la gana. Vamos, con lo fácil que eran antes los vaqueros: rectos, pitillo, elefante y de talle alto o talle bajo. Joder con los vaqueros, perdón, denim.

viernes, octubre 12, 2018

¿Por qué nadie saca la ropa de otoño o de primavera?


Hace frío: saco la ropa de invierno. Aprieta el calor: desempolvo la ropa de verano. Así año tras año, injusticia tras injusticia. Qué vergüenza, qué forma de maltratar al otoño y la primavera. ¿No es cierto, almas de cántaro, que la ropa de invierno se saca en otoño y la de verano, en primavera? ¿Por qué nadie dice "mañana hago el cambio de ropa de primavera a otoño"? Ay, qué pena, penita, pena. No sé si abrir un change.org para reclamar la dignidad de las dos estaciones ninguneadas, escribir al defensor del pueblo o convocar una manifestación. En fin, mientras barrunto qué hacer voy a sacar la ropa de otoño, que el frío ha aparecido y me apetece cubrir mis carnes con un frondoso jersey.
    ¡Que viva el otoño y la primavera!

martes, octubre 02, 2018

Body positive


Querida Amaia Montero: no nos conocemos, ni creo que lo hagamos, pero esta semana me has preocupado. No pienso juzgarte por tu apariencia física. No sé si tienes un leve sobrepeso, ni me importa. En cambio, te puedo confesar, como canta la Pantoja, que a mí me sobran unos cuantos kilos. Tal vez porque cocino muy bien (modestia aparte), me encanta comer, beber, organizar fiestas, un tiroides alocado... ¿Me gustaría estar delgada? Pues sí, no me importaría, pero tampoco mucho, que las dos veces que he estado escuálida ha sido por problemas y me encantan las alegrías.  
   Asumo que no estoy en mi peso ideal y me he convertido en una body positive, tanto que si alguien me llama gordi sonrío y si me dicen guapa o simpática, también. No me gusta dar consejos, pero es mejor reconocer las cualidades y defectos de cada uno y, sobre todo, reír. La vida son dos días y al final la gente te recuerda más por las carcajadas, aventuras, historias, anécdotas... que por unos kilos de más. No voy a negar que la apariencia física es importante y a todas nos gusta estar guapas: delgada-guapa, gordi-guapa... Y si una es fea pues tampoco pasa nada. Como dice mi madre: cada uno tiene su público y, en tu caso, más.